El Universo parte 1

Antes de comenzar, bien vale la pena reflexionar en lo siguiente: como sabemos, siempre nos hemos preguntado ¿Qué es el Universo?, ¿porqué existe?, ¿quién lo puso allí o si siempre ha estado en su lugar?. ¿Es una evolución o una casualidad de circunstancias que se dieron para su principio?. Pocas respuestas hemos encontrado acerca del infinito, a veces ciertas, a veces inciertas y siempre misteriosas en algún sentido. Pero... ¿Qué mismo es?.

 

Hace más de 30 años al momento en que escribo, desde el pequeño planeta azul, los seres humanos lanzaron dos sondas al espacio, las llamadas “Voyager” (viajero) 1 y 2. Avanzaban de prisa, aparentemente a grandes velocidades y al perpetrar en las tinieblas del espacio fueron descubriendo lugares, objetos y situaciones increíbles. 

 

Mientras recorrían por el sistema solar, se acercaban a un planeta que ha sido uno de los que llaman mucho la atención: Júpiter, el gigante. Las sondas captaban señales de radio provenientes de ese misterioso planeta y eran grabadas por los científicos, si las escuchas detenidamente te producen sensaciones de miedo, pero al mismo tiempo te asombras. De forma similar llegaron a Saturno y pudieron observar esos anillos majestuosos de un planeta también enorme, miles de fotos llegaban a la Tierra y los astrónomos seguían maravillándose.

 

“Cuando miro hacia atrás, me doy cuenta de lo poco que realmente sabía acerca del Sistema Solar antes de Voyager” dijo: Ed Stone científico del Instituto Tecnológico de California; es que explorar el vasto universo es eso, es descubrir un poco más de lo maravilloso que allí existe. Imagina la felicidad que sintieron los humanos, cuando la sonda llegó a Urano, un planeta verdoso, ¡totalmente!. Si pudiésemos entrar allí, de alguna forma en la que seamos inmunes a las fuerzas extremas del planeta, ¿qué pudiésemos observar?, solamente imagina un instante esos cielos de Urano ¡pero vistos desde dentro del propio planeta!. 

 

Y como dato curioso, lee lo que cita Wikipedia: "La rotación de Urano, igual que la de Venus, es retrógrada y su eje está inclinado casi 90º grados sobre el plano de su órbita. Durante la mitad de cada órbita, es decir, durante 42 años, el polo norte apunta directamente hacia el Sol, y durante la otra mitad de la órbita es el hemisferio meridional el que recibe la luz solar, mientras que el hemisferio septentrional permanece en una larga noche helada. Sólo una franja relativamente estrecha en torno al ecuador experimenta un patrón normal de días y noches…" increíble pero cierto. ¿Será que esos climas siempre han sido así?  

 

Y ni hablar del famoso Neptuno, tormentas por doquier, vientos tempestuosos y su increíble color azul debido a los componentes de su atmósfera. Por algo lo llamaron Neptuno, el dios del mar en la mitología Romana. Estos son increíbles planetas enormes, entonces aquí viene una reflexión profunda: ¿porqué son de ese gran tamaño, justamente "después" del cinturón de asteroides de nuestro sistema solar?. ¿Será que algún día en el pasado, eran del tamaño de la Tierra o Marte o Venus y un día fueron “inflados” con abundante gas de esa manera?. 

 

Cuatro planetas desde Mercurio hasta Marte, pequeños y de roca con núcleos de metal, y de los cuales Venus es quien tiene una atmosfera extrema y aplastante con nubes de acido sulfúrico, es tan espesa que cuando atrapa los rayos del sol, no los deja salir, convirtiendo su interior en un inmenso ¡caldero de azufre, un horno, un verdadero infierno, con una presión atmosférica aterradora!.

 

Estos cuatro planetas (Mercurio, Venus, Tierra y Marte) están separados de los gigantes (Júpiter, Saturno, Urano y Neptuno) por un cinturón de miles de asteroides. ¿Será una simple coincidencia que existan tantos fragmentos de roca girando alrededor del sol?.

 

Nuestro sistema solar es un lugar misterioso en el infinito Cosmos de eso no hay duda ¡y eso mismo es lo realmente hermoso del Universo! y cuando miramos el cielo nos maravillamos más.

  

Muy probablemente con un café en la mano, muchos astrónomos daban sorbos a cada instante mientras sus ojos se asombraban al observar lo que no podían creer. Desde sus laboratorios con telescopios que siempre apuntan al universo y computadoras que ayudan a los cálculos matemáticos y almacenan cantidades gigantescas de información, se maravillaban con lo que enviaba la sonda Cassini y otras desde tan lejos.